Entre jarales se perdió la gana de comer debido al intenso éxtasis que el monte te dotó por tanto tesón mostrado. En casa se está bien, recogido al calor del hogar, ...., pero en el monte..... en el monte te pierdes para volverte a encontrar,...., para dar más sentido aún si cabe a nuestras vidas. Gracias José Antonio, por esas beldades que nos traes siempre desbordando naturaleza. Salu2