Esta tarde de nuevo salí a la carga en busca de los níscalos, contra mas se me resistan mas los voy a buscar, así que haciendo caso de unos amigos decido ir a un pinar en medio de la sierra, rodeados de alcornoques, una pechá de subir monte, casi me tengo que llevar las cuerdas para hacer rápel y llegar al sitio.Una vez atravesamos el alcornocal, vimos los primeros pinos, carrasqueños, como les decimos aqui y aluciné cuando nada mas entrar veo el primer níscalo.Todo quedó en un espejismo, ya que fué el único que corté.
Por el contrario Cantharellus lutescens y tubaeformis las que quisiera, para llenar 10 cestos, solo pudimos coger algunas ya que empezó a tronar y tuvimos que bajar del monte con un manto de agua.En fín que seguiremos intentando dar con los dichosos níscalos, a cabezón no me gana nadie y a patear el monte tampoco
(ya dare contigo).
Había auténticas alfombras.
Y este el resultado de la hora y media aproximadamente que estuvimos.