Puri, el Anisakis, da dos cuadros clínicos distintos; uno es el provocado por las larvas del parásito vivo "la anisakiasis", que afecta a cualquier persona que ingiera pescado con el parásito y cursa con un cuadro "gastrointestinal" y otro muy distinto es un cuadro alérgico, por el consumo del parásito tanto vivo, como muerto, sólo en personas alérgicas a la proteína de este parásito. En estas personas el consumo de cualquier pescado, susceptible de portar el parásito, no es aconsejable, aunque se hayan tomado las medidas para su destrucción, por ejemplo la congelación, ya que persiste el parásito, aunque este muerto.