Estas 2 últimas semanas han sido las mejores en cuanto a cantidad de hongos y cesáreas en la cornisa cantábrica desde que tengo uso de razón. El motivo fueron las lluvias torrenciales de mediados de septiembre, y una temperatura diurna de unos 23ºC y una nocturna que no ha bajado de los 12-13ºC. Todo ello ha propiciado grandes recolenctas por esta zona.
Yo particularmente, me he movido por mis zonas habituales en los límites de Cantabria con Bizkaia, e incluso, en las zonas próximas a mi casa en Astrabudua.
Amanita caesarea, en roble con castaño, mixto de haya y roble, y encinar calizo con ph ácido.
Boletus aereus en los mismos hábitats que los huevos. Eso sí, extremadamente abundante.
En roble y castaño
En haya y roble
En encinar puro
El edulis sólo lo he encontrado en zonas altas de hayedo
Y el reticulatus en todo tipo de robledales, puros, o mezclados.
Pero, había mucho más...Amanita ceciliae, Amanita echinocephala, Agaricus silvicola y Gyroporus castaneus entre otras especies en los encinares cantábricos
En las alisedas Gyrodon lividus
En las campas un montón de cosas
Agaricus: arvensis, campestris y urinascens
Senderuelas, Marasmius oreades
Y el tóxico Marasmius collinus que se le parece mucho
Se pueden ver los Boletus dupainii este año
Al igual que el Boletus legaliae, el rhodopurpureus y el satanas
Algunas Amanitas rubescens y virosa
Y voy a terminar con la peligrosísima Entoloma lividum, que me lio, y no acabo
Y se me quedan en el tintero un montón de especies más, pero no es cuestión de aburrir al personal