Hola Mariano,
Me encantan tus predicciones meteorolologicas y tu verborrea con ese léxico que ya no se utiliza hoy en dia, me haces reir un montón (en el buen sentido de la palabra reir), peró caray, no seas tan exagerado, que yo hay años que he cogido infinidad de pinícolas en primavera, bien entrado junio, duros como el pedernal, sanos como Matusalen a los 300 años, más blancos por dentro que una casa andaluza recién encalada y con una nevada de aupa y de gusanos ni uno.
Bien es cierto que al poco de cogerlos, si no los utilizas pronto, empiezan a deteriorarse.
Pero eso de oir los mordiscos de los gusanos, me pone los pelos de punta (y eso que soy calvo)
Un saludo desde Tarragona.
Gracias boletusaereus, a ver si recupero pronto las predicciones primaverales cuando vuelva la actividad convectiva profunda, pues esta primavera se presenta en principio muy tormentosa, pero parece que ha habido un dilatado parón meteorológico, aunque parece ser que en poco minutos volverán los fenómenos meteorológicos de naturaleza extrema.
Eso que dices tiene una sacrosanta explicación. El problema al que se enfrenta el pinicola primaveral, es que recoge el relevo generacional de toda la masa larvaria que estaba trabajando sobre las masas marzuolares del ocaso invernal y de principios de primavera. Si los sueles coger a finales de junio, me supongo 2 cosas:
1. Que es una zona muy elevada, y por tanto, con potentes nevadas, y los marzuelos no salen en ese lugar por ser de clima demasiado extremo, y por tanto, el pinicola es la primera seta que sale, lo cual significa que la primera generación estará libre de las mandíbulas insectarias.
2. Al salir tan tarde, hay una alta probabilidad de que los pinicolas salgan a la vez que los boletus aestivalis, y por tanto, de que toda la masa gusanera se dirija hacia ese objetivo, al tratarse de boletus mucho mas dulces y aromáticos, dejando a los pinicolas al margen. Recuerda que como las personas, los gusanos también tienen preferencias, y mas marcadas si cabe que nosotros.
Los pinicolas mas agusanados son los que nacen en bosques marzuelables, y en concreto cuando salen un tiempo después de morir estos últimos, encontrándose con los insectos con un apetito contumaz. (Para ser mas científicos, con unas ganas pantagruélicas de poner voraces huevos)
Cuando por factores climatológicos se abre una brecha de varios meses entre la marzuelería y los boletus, o bien cuando no es un año o bosque marzuolable, los insectos o no están presentes en el ambiente, o abandonan el nicho del bosque, y ya no se produce el traspaso hacia las masas pinicolares, por lo que estos nacen en total virginidad.
Recuerda que lo que agusana a los pinicolas en primavera no son mosquitos, como sucede en otoño, sino escarabajos de distinta índole, y no tienen tan fácil el desplazamiento desde emplazamientos cercanos, al ser de naturaleza mas pesada y de menor movilidad.
Por eso los bosques solitarios también son mas saludables, que por ejemplo, como dice Felix, los idolatrados pero extensísimos bosques sorianos, que suponen una plaga bíblica para los pinicolas, al ser bosques a relativamente baja altura, que se minan de marzuelos todas las primaveras, justo antes de estallar las pinicoladas.
En cuanto a lo de escuchar los mordiscos de las larvas, con pinicolas no lo he probado, pero como tienen la carne mas compacta no creo que se oigan a simple oido. Habria que probar con un estetoscopio que seguro que se oye bastante, y sería un buen método para detectar que pinicolas no debemos recolectar antes de arrancarles, pero corremos el riesgo de que si nos ve alguien auscultando los boletus para saber cuales hay que coger, igual llaman por teléfono para que nos encierren.
Espero haberte aclarado algo sobre este tema tan polémico y confuso.
Un fortísimo abrazo.