Mi hermano y yo nunca habíamos cogido boletus, creo que no crecen en nuestro terreno.
El sábado nos aventuramos en los montes universales en su busca y desconocedores del terreno (y de todo los demás) no conseguimos ver ninguno.
Cuando el día languidecía e iniciábamos la vuelta a casa, vimos a un buscador y su hijo. Caminaban por el arcén y llevaban las cestas casi llenas de aureus y pinícolas.
En cuanto pudimos, dimos la vuelta para hablar con ellos, nos recibieron con un encanto especial, nos regalaron dos ejemplares y nos indicaron un lugar donde podríamos encontrar alguno más, como así fué (dos, uno mi hermano y otro yo).
Resultó pertenecer al foro micológico de Cuenca, le dí mi tarjeta y espero que me llame.
Desde aquí un fuerte abrazo para los dos y gracias, muchas gracias........