No estoy de acuerdo con Aurelio...si te empapuzas todos los dias de marisco seguramente que acabes con el acido urico por las nubes...tu crees que unas centollas de vez en cuando te harian daño.
Pues a mi sobrina un par de centollas la llevarían a la uvi directamente, y eso con suerte, pues podría perfectamente ir directamente al cementerio sin pasar por el hospital, aunque probablemente nunca llegara al segundo bocado.
Está claro que en exceso todo es malo, hasta el agua es potencialmente mortal, se han dado casos de concursos de beber agua donde el ganador no ha podido disfrutar del premio, pero aquí hablamos de substancias que son potencialmente toxicas, que quizá solo desencadenen enfermedad o muerte a partir de ciertas dosis, pero que aunque sea en dosis bajas, siempre harán trabajar al hígado o nos causaran subrepticiamente algún daño, sin que nos demos cuenta.
Seguramente que un mg de amanita phalloides no haga daño, pues sino no podríamos tocarlas ni olerlas, pero eso no quiere decir que sea bueno precisamente.
Debemos tener en cuenta que cuando olisqueamos una amanita phalloides respiramos miles de moléculas phaloidianas y de esporas en cada esnifada, y conozco gente que tras tirarse toda la mañana cortando phalloides se ha hecho luego un bocata de chorizo sin limpiar antes la navaja.
Por suerte el hígado de la especie humana, con cantidades tan infinitesimales de veneno es capaz de lidiar perfectamente, lo que no sucede con una degustación, pero eso no quiere decir que oler phalloides o untar nocilla con una navaja que ha trabajado con phalloides sea sano precisamente.