al final se va a convertir en un deporte de riesgo nuestra aficion.
Ir a por setas es el "deporte" mas arriesgado que existe, lo que pasa que la apariencia es de paseo agradable por el campo, en familia, con la cestita, a coger setitas, con la abuelita y los nietecitos, pero nada mas lejos de la realidad.
Los peligros al acecho son tantos que lo raro es que aun sigamos vivos para contarlo tras centenares de salidas al campo. Yo creo que algo nos protege a los seteros, porque sino no tendría explicación que conservemos aun todos los miembros e integridad fisica.
Paso a enumerar la lista de unas pocos de los miles que hay:
1. Desorientarse y perderse en el campo (me paso en varias ocasiones, si es pronto por la mañana mas tarde que temprano te terminas encontrando, aunque sea a varios kilómetros del coche y alguien te tenga que llevar hasta el)
2. Perderse en el campo y que se te haga de noche (me paso en una ocasión y salimos gracias a que la carretera estaba relativamente cerca y de vez en cuando pasaba algún coche, pero ya teníamos todas las papeletas para dormir en el campo esa noche, y sin almohada)
3. Torceduras, esguinces, dislocaciones y caídas (en una de ellas de las múltiples que he sufrido, caí sobre una rama y casi me parto la espalda, solo acabe sin poderme mover, pero por suerte no tenia nada roto)
4. Clavarse la navaja (uno de los mayores micólogos de mi zona casi se clava una en el corazón cayéndose sobre ella abierta en punta, creo que le salvo una medalla)
5. Garrapatas con todo su listado de enfermedades asociadas (Se cogen por sistema en casi cada salida de abril a septiembre, sobre todo en bosques de frondosas)
6. Los perros de pastor si te cruzas con un rebaño. (A mi un día me salieron 6, y mastines en varias ocasiones, por suerte, ya dentro del coche, y por eso puedo contarlo.)
7. Toros, vacas, caballos y ataques de jabalies. Aunque las vacas en teoría no atacan, ellas tiran para adelante, y si estas en su camino, te pasan por encima. Lo raro es que no haya aplastados por vacas entre los seteros todos los años. Sera que la gente se cuida muy mucho de no acercárseles demasiado, pues estos animales imponen. Los caballos son mas peligrosos y a veces se tiran a por ti, así que hay que tener sumo cuidado con animales de semejante envergadura.
8. Colmenas, avisperos, alacranes, vívoras y escolopendras. (todo el mundo ha tenido algún encontronazo con alguna de ellas, y seguramente en mas de una ocasión, y mas de dos,...)
9. Acribilladuras por mosquitos, ortigas, zarzas y espinos (esto también por sistema en verano, y como vayas en pantalón corto, pobre de ti, volvías con las piernas mas flageladas que la espalda de Jesucristo, aparte de volver con miles de garrapatas)
En el prelitoral catalán, además de las zarzas están las zarzaparrillas, que tienen las espinas aun mas punzantes de las zarzas, y no hay una hectárea de bosque sin ellas.
10. Y además de eso, muchas veces corres el riesgo de ni poder volver, porque el coche se te atranque en caminos embarrados varios.
Una vez nos tuvo que sacar un tractor, y en otra ocasión pudimos salir gracias a que la acequia tenia una zona cementada, de lo contrario, de allí ni con tractor, pues la única salida viable era cuesta arriba y era un barrizal.
En cuanto al tema de las avispas asesinas, tengo entendido que un solo "ejercito" de 30 de ellas puede acabar con una colmena en menos de una hora, decapitando a las abejas una a una, para luego llevarse las larvas para alimentar a su prole.
En Japón, que es su país de origen, las abejas han aprendido a defenderse con una táctica que las abejas europeas desconocen, rodeándolas entre muchas aprovechando su mayor numero hasta inutilizarlas.
Tendremos que enseñar artes marciales a las abejas autóctonas si queremos que sobrevivan a esta plaga invasiva, para que aprendan a defenderse de ellas como muy bien saben hacer las abejas japonesas.
Un fortísimo y abejero abrazo.