Los boletus hay que cogerles como muy tarde a últimos de junio; ahora en pleno verano tienen un coeficiente de larvarización muy avanzado, pues hay un mayor porcentaje de insectos en el campo y las temperaturas son mas elevadas, además de que salen menos efectivos fúngicos.
Al haber menos unidades fúngicas por insecto y hacer mas calor, los gusanos se reparten entre menos especímenes y trabajan a una mayor velocidad con el resultado que todos conocemos.
De todos modos, si hay pocas galerías siempre es comestible, siempre que hablemos de aereus y aestivalis claro, pues estos hongos se parasitan de una especie de tijeretas, que no son muy agresivas con la seta, y apenas dejan excrementos, sino solo unas cuantas galerías sin mas.
En cambio, a los pinicolas y edulis les pican mosquitos, que los hacen polvo literalmente, y posteriormente se pudren.
El resultado es que la mayoría de boletus estivales tienen galerías de "ventilación", y como mucho están mas oxigenados, pero son totalmente validos y aprovechables para la cocina.
Ademas, el gusano cuando cogemos la seta casi nunca esta presente, pues ya ha completado su ciclo la mayoría de las veces, o bien sale de ella en cuanto es recolectada, de forma que al llegar a casa, como mucho tendríamos los gusanos por fuera, y basta con soplar las setas o pasarlas una brocha por encima para quitarles todos.
Raro es el gusano que permanece en el interior, por lo que los boletus hiperventilados están listos para la sartén, solo que la apariencia es como si cortáramos laminas de emmental.
Un abrazo.