Seguimos:
Familia Rhodophyllaceae
Clitopilus: del griego klîtós, inclinación, declive, y pîilos, sombrero, píleo, por la silueta del píleo, que es a menudo deprimido o infundibiliforme.
Entoloma: del griego entós, de aquí el prefijo ento, dentro, en el interior, hacia adentro; y lôma, franja, orla, margen, fleco, debido al caracter interno del velo, por lo que éste casi nunca es aparente en el margen del píleo, el cual además es incurvado o involuto en la mayoría de sus especies.
Rhodophyllus: del griego rhódon, rosa, de color rosa; y phíllon,lámina, hoja, haciendo referencia al color rosado de sus láminas.
Familia Volvariaceae
Volvariella: (o Volvaria) del latín volva, envoltura, cubierta; y el sufijo -aria, conexión o posesión; debido a la presencia de un velo universal que envuelve al basidioma y que al romperse se queda en la base del estípite.
Familia Cortinariaceae
Cortinarius: del latín cortina, cortina, velo; con el sufijo -aria, que indica conexión o posesión; por la presencia del velo parcial que forma una cortina o telaraña que cubre las láminas.
Galerina: del género Galera, que deriva del latín galerus, gorro, píleo, cubierta de la cabeza parecida a un casco; con el sujifo -ina que indica pertenencia o relación con algo.
Hebeloma: del griego hébe, juventud, joven, pubertad; y lôma, franja, orla, margen, orilla, fleco, en alusión a la presencia de velo interno fibriloso, a modo de cortina, en los especímenes jovenes de muchas especies, quedando restos de dicha estructura en el margen incurvado del píleo.
Inocybe: del griego ís, inós, fibra, nervio; y kýbe, cabez, píleo, debido a la presencia de fibrillas en el píleo.
Seguimos otro día.
Gracias Elsaro, gracias Carmen.
Salud.