Hoy, 13 y martes, Jesús me ha llevado de excursión, para mi que pretendía machacarme porque vaya pendientes que tenían los hayedos
-. Bueno , mejor no me quejo , encima que lo que tengo que hacer es darle las gracias no es cuestión de reclamar porque no haya ascensores por los montes
.
Menos mal que el día estaba perfecto porque los marzuelos se han hecho de rogar, pocos y pequeñajos, mi hija dará cuenta de ellos en la cena;lo peor es que está todo bastante seco, he procurado cantar mientras subía y bajaba cuestas, no se si servirá de algo pero por intentarlo...
Dos níscalos un poco pasados