Lastima que el domingo empezó a llover muy pronto, llegamos el sabado a la hora de comer, nos instalamos en unas cabañas de piedra con chimenea, pero antes de que se nos hiciera de noche paseamos por los alrededores de las cabañas y cogimos bastantes chantarelas, en una horita, ya se hizo de noche y a dormir que al dia siguiente queriamos subir al pico *****, camino al pico**** fuimos recolectando y a la bajada ya empezó la lluvia, pero daba igual, la cesta se iba llenando y con especies que nunca habia visto (mejor aun) como las trompetas y las lenguas, fue un fin de semana de descubrimientos, tampoco habia visto nunca el mutinus caninus, fue todo un acontecimiento. Nunca habia estado por esta zona con la cesta, y no sabia lo que me iba a encontrar, la sorpresa fue de lo mas agradable.