Exactamente Fernando, y estas razones son las que me llevan a la duda. El olor sería lo más importante para poder decidir, ya que L. candidus tiene un componente espermático evidente.
L. candidus suele aparecer ya en septiembre en la zona centro, salen muy típicos, muy blanquitos. Pueden salir, por mi experiencia, hasta finales de octubre o más, y en cuanto empiezan las heladas pierden el color blanco y comienzan a ponerse más marrones y a romperse el márgen creando grandes lóbulos, que en I. geotropa suelen ser más pequeños, más como estriaciones amplias. Por otra parte, la inserción de las láminas en el pie es más claramente decurrente en L. candidus que en I. geotropa, aunque mi experiencia con esta última es más escasa, especialmente con ejemplares muy desarrollados. También la densidad laminar es mayor en la primera.
Todo esto unido a ese pie tan grueso y corto me lleva a pensar en esta especie, pero sin saber el olor y más teniendo en cuenta tu opinión, que sabes que respeto muchísimo, me lleva a quedarme con la duda.
Saludos.