10 de marzo de 2013
Quedo con un viejo amigo en horas bajas, amigo de esos que se cuentan con los dedos de las orejas, para enseñarle la charca de los tritones, la mina abandonada de yeso, túmulos funerarios y el bosque de invierno en Gaztelumendi. Mi amigo es artista, él me enseñó a hacer esos videos musicales con los que habitualmente os castigo, hace muchos años me sacó de mil y un apuros y cuando nos juntamos el tiempo se retuerce como el blandyblue, como en el cuadro de los relojes de Dalí, las ventanas de su casa en plena Parte Vieja suelen están abiertas a mundos bellos e imposibles, aparece puntual y me suelta:
-Alberto, sólo he dormido tres horas, ayer tuve liada con una amiga …
Cambio de planes, la excursión programada es de desnivel exigente, y como se que ahora le obsesionan los cursos de agua, le llevo a un casi perdido arroyo de montaña que remontamos sin apuros entre chascarrillos y confidencias, mi amigo así lo vió…
http://www.youtube.com/v/QG52ap_lo_cA la derecha, desniveles de 400 metros, a la izquierda ríos de roca caliza con desniveles de 800 m. Mi amigo no ha visto nunca a Txanogorritxu, la caperucita roja de invierno, y enseguida la encuentra…. alucina.
-Alberto, que pocas fotos estás sacando, que raro…
Voy a lo mío, estoy en un lugar inesperado, sin explorar, oliendo, mirando, sintiendo sin exigir, sin esperar sorpresas, es la única forma de que aparezcan…
En el húmedo embudo que paseamos me encuentro un precioso carabo al que me siento incapaz de ponerle apellido.
Poco a poco, la pista se hace camino, el camino se vuelve senda y la senda desaparece entre torrenteras, surgencias y manatiales.
Llega la sorpresa, dos pequeños montículos de tierra recién removidos, al fin hemos encontrado el territorio del Desmán del Pirineo. Un pequeño animal en peligro de extinción debido sobre todo a la fragmentación de su hábitat; el desmán tiene algo de rata, algo de topo y algo de musaraña. Como son territoriales buscamos las heces, las intuimos, las olemos, joder que alegría, a quince minutos en coche de casa y una hora de paseo…
Fotografiar un desmán, pasa por una captura nocturna con una compleja infraestructura que no merece la pena. Lo que es la vida, en un pequeño montículo de tierra, enterramos una mañana feliz y perfecta.... si quereis saber más del desmán, wikienlace:
http://es.wikipedia.org/wiki/Galemys_pyrenaicusHasta pronto.