Tras un mes teniendo compromisos todos los fines de semana para ir al monte, éste último he ido solito a los bosques cercanos a mi casa de la playa, en Cantabria Oriental.
El sábado era el cumpleaños de mi hijo Gaizka y tenía invitados a comer, así que fui a 15km de casa a buscar algo para darles de comer.
Las campas y los bosques estaban llenos de galanperna, Macrolepiota procera
En las campas también encontré el Agaricus squamulifer, una bola de nieve que se tiñe de rojo
Y entre los robles y las hayas Amanita franchetii(parecida a una rubescens pero con volva y restos de volva amarillos, y no rojos), Boletus rhodopurpureus(con el sombrero rosa con verrugas) Boletus reticulatus(acompañado de la chivata Clitopilus prunulus), Cyclocybe cylindracea(en chopo), la peligrosísima Entoloma sinuatum, Lycoperdon molle y Ramaria fumigata entre otras especies.
Y el domingo sobre las 11, como no me apetecía ir a la playa, me fui a dar una vuelta por los robledales y castaños que están alrededor de casa(la zona más lejana a casa no llegará a 400m).
Allí encontré muchas cositas, como el precioso Pluteus leoninus de color amarillo, en madera de roble
Amanita crocea en un roble junto al rio, que ningún año me falla
Tricholoma ustale, muy amarga de color marrón amarillento, muy viscosa y pie blanco con tonos rojizos. Se oxida al rojo. Y Tricholoma ustaloides de un marrón rojizo, con el pie rojo hasta donde comienza la influencia del sombrero donde es blanco, no suele oxidarse, y el sombrero está recubierto de un moco viscoso super amargo.
Y setas comestibles, como el Craterellus cinereus y los Boletus aereus y reticulatus
Cantharellus cibarius bajo castaños
Y en un grandioso setal de Cantharellus cibarius, entre las argomas, llené la cesta
Y con la cesta llena de unos rebozuelos enormes, me fui a casa sobre la 1