Ayer ne decidí, por fin, a probar las Armillaria Mellea. Habia leido que por aquí no se suelen consumir, pero que en el Este de Europa son muy frecuentes y muy consumidas. Así pués, como cogí un buen ramillete de ellas, muy pequeñitas, las corté por debajo del sombrero, dejando medio centímetro de pie, las cocí durante 15 o 20 minutos, les quité ese agua y las volví a poner otros cinco minutos en agua limpia. A continuación las hice refritas con poquísimo aceite y cebolla muy picada. No le añadí ni ajo, ni vino ni otras especies para intentar sacar su sabor más puro. La verdad es que no me dijeron absolutamente nada. Muy insípidas. Se comen más con la vista, (pués son muy gratas de ver en el plato) que con el gusto. Esto es lo que os puedo decir. ¡Ah si, también añadir que las comí de noche, con la cena, y no he tenido la más leve molestia de estómago, si bien la ración no fué excesivamente grande!.